Fandom: JE, KAT-TUN
Parejas: Akame <3
Género: Romance, comedia? (no se si alguien se reirá xD)
Parejas: Akame <3
Género: Romance, comedia? (no se si alguien se reirá xD)
Advertencias: No hay necesidad, a menos claro, que no te guste el Akame
Resumen: Kame se despierta y se da cuenta de que no puede menitr (A alguien le suena "mentiroso mentiroso"? soy una ladrona de ideas XD). Lo que le traerá algunos problemas en su trabajo, pero tambien cosas buenas.
Nota(s) de la Autora: Me animé a escribir otro fic inmediatamente cuando terminé el anterior *O* y quize hacer uno con mas capitulos, espero que lo disfruten
Disclaimer: No son mios, si lo fueran ustedes me odiarían en vez de odiar a la JE XD. Además como deben saber no gano dinero con esto, solo uso sus nombres y vidas para mi deleite de fangirl. La historia está inspirada en mentiroso mentiroso, pero no es exactamente igual, Kame NO es un abogado XD. Solo tomé la idea de no poder mentir.Resumen: Kame se despierta y se da cuenta de que no puede menitr (A alguien le suena "mentiroso mentiroso"? soy una ladrona de ideas XD). Lo que le traerá algunos problemas en su trabajo, pero tambien cosas buenas.
Nota(s) de la Autora: Me animé a escribir otro fic inmediatamente cuando terminé el anterior *O* y quize hacer uno con mas capitulos, espero que lo disfruten
- No te vayas, no quiero ir a un doctor, sólo quiero que me lleves a mi departamento.
Jin se llevó a Kame en auto al departamento. Una vez adentro, lo ayudó a acostarse.
- Si necesitas dormir puedo irme.
Kame lo tomó de la manga y negó con la cabeza, se veía más vulnerable aún, con las mejillas sonrosadas, los ojos casi cerrados y la boca semi abierta. Eso hizo que Jin sintiera el corazón latirle más fuerte.
-¿Quie… quieres… comer? Puedo preparar algo…. No soy bueno cocinando, pero puedo traerte algo de comer… qué… ¿qué necesitas?
- Que te quedes aquí conmigo – susurró Kame.
Jin se sentó en la cama y le acarició el cabello, Kame se relajó, Jin podía sentirlo, así que continuó. Las caricias de Jin se sentían suaves e inseguras, pero agradables.
- No quiero que te vayas – dijo con una voz débil.
- No me iré.
Kame le sonrió débilmente, su cuerpo pesaba, pero se sentía relajado, nada más importaba, Jin estaba ahí con él y no se iría, se quedó dormido sintiendo sus caricias
Aunque Kame ya estaba dormido, Jin no se detuvo inmediatamente; a él también le relajaba acariciarlo y contemplarlo. No se dio cuenta y se quedó dormido sentado con su mano sobre la de Kame.
Lo despertó un quejido de Kame, estaba dormido, pero se quejaba.
- Kazu… - tomó fuertemente su mano. – Cálmate…
No sabía qué hacer en ese momento, no sabía si algo le dolía o estaba teniendo una pesadilla. Después de unos minutos de quejidos entrecortados, Kame se calmó.
- No me asustes así – le susurró Jin al oído.
Se quedó contemplando el rostro de Kame… antes de pensarlo o meditarlo estaba besando su frente, sus labios hicieron contacto con su ardiente piel. Kame abrió los ojos débilmente y tomó el rostro de Jin. Él se quedó inmóvil, asustado de ser descubierto en el acto, pero Kame acercó lentamente su rostro al de él y lo besó suavemente en los labios.
- Gracias por todo.
Jin lo miró sin dar crédito a lo que acababa de ver y sentir, Kame se recostó nuevamente y se tapó temblando.
- ¿Tienes frío?
- Sí, ¿puedes traerme más mantas? Están en ese mueble.
Jin fue rápidamente a buscar las mantas, las llevó todas y se las puso encima.
- ¿Ya se te pasó?
- No es inmediato, las pusiste recién.
- Oh…
Pasaron unos minutos y seguía temblando violentamente. Jin se metió a la cama y se acostó con Kame.
- ¿Qué haces?
- Ayudaré a que no tengas más frío, no puedo quedarme mirando como tiemblas.
- Te contagiarás.
- No me importa.
Jin lo abrazó y comenzó a frotar sus manos por el cuerpo de Kame para calentarlo.
- Ahora duerme.
- No puedo dormir si me haces eso.
- Es para calentarte.
- Lo estas logrando – dijo escondiendo su cara en el pecho de Jin.
No sabía si era el extremo calor bajo todas esas mantas o el comentario de Kame lo que hizo enrojecer al máximo su rostro. Kame sintió el corazón de Jin latir rápidamente y lo abrazó. El frío lentamente se estaba retirando, pero no quería decirle a Jin, porque dejaría de abrazarlo y dejaría de estar dentro de la cama con él. Sólo quería estar mas tiempo así…
- ¿Ya pasó?
Kame se escondió más en el pecho de Jin.
- Sí – susurró.
- Entonces…
- No…
- Quiero sacar algunas mantas, o moriré de calor.
Kame rió.
- Eso sí puedes hacerlo.
- ¿Qué es lo que no querías que hiciera?
- Que te fueras.
- Te dije que me quedaré.
- Me refería a irte de la cama…. ¿por qué me haces decir estas cosas? – dijo avergonzado.
- Lo siento, necesito saber – dijo riendo. – No te preocupes, estoy cómodo aquí, me quedaré… y creo que necesito dormir… mañana hay ensayo. Tú te puedes salvar porque estás enfermo, pero yo no.
Kame le dio palmadas en la cabeza.
- Está bien, descansa.
- Siento como si los papeles se hubieran invertido.
Jin se durmió abrazando a Kame contra su pecho. Kame también se quedó dormido.
“Tititit Titititi”
Jin despertó desconcertado con ese ruido extraño. Era el despertador de Kame. Lo apagó, volvió a abrazarlo y cerró sus ojos.
- Jin… es hora de levantarse.
- No, es hora de que sigamos durmiendo.
- Hay ensayo, el concierto es en tres días.
- No me hará mal un ensayo menos.
- Yo me voy.
- Estás enfermo.
- Amanecí mejor, me levantaré…
Jin abrazó más fuerte a Kame, sin abrir los ojos aún.
- No irás a ninguna parte, estoy tan bien así durmiendo…
No podía negar que él también estaba muy bien así, pero el trabajo era trabajo, debía levantarse aunque no quisiera.
- Jin, me quiero levantar.
Jin lo soltó.
- Si eso es lo que REALMENTE quieres.
Kame lo miró con los ojos muy abiertos.
- ¿Qué pasa?- le preguntó Jin.
- ¡¡¡JIN!!! ¡¡¡Puedo mentir!!!
- ¿En serio?
- ¡¡SÍ!! ¡¡Te acabo de mentir!!
- ¿Debería sentirme feliz porque me mentiste?
Kame rió.
- Bueno, sí, también… la verdad es que no me quería levantar.
Jin lo tomó de la mano.
- Entonces vuelve aquí.
- Jin, no lo hagas difícil, tenemos que ir a ensayar.
- Está bien – Jin aceptó de mala gana. – ¿Me harás desayuno?
Lo miró como un cachorrito.
- Te aprovechas de un enfermo.
- Me dijiste que estabas bien, no aprendiste nada de tu situación anterior.
- Era una broma. Está bien, te haré desayuno.
Llegaron justo a la hora de empezar el ensayo, el cual fue más duro ya que solo tendrían un ensayo más, que sería el día antes del concierto.
- Hoy llegaron juntos – comentó Koki a Nakamaru y a Ueda.
- Parece que hicieron más que las pases – dijo Ueda.
- Creo que malinterpretan las cosas ¿No puede ser acaso que justo hoy los dos llegaron cuando empezaba el ensayo y se encontraron antes de entrar…?- Preguntó Nakamaru.
Hubo una pausa
- Creo que no – respondieron a coro.
- Pero no les digamos nada, están tan bien así.
Asintieron.
Kame, Jin y Junno se reunieron con los demás.
- Casi no llegan a la hora, ¿eh?- les dijo Koki.
- Koki tonto – dijeron Nakamaru y Ueda.
- Ayer me sentí enfermo y Jin me llevó a casa y se quedó porque no me sentía bien – se defendió Kame.
- ¡Oh! ¿Ya puedes mentir?- preguntó Ueda.
Kame enrojeció.
- No es lo que crees, pero sí, he vuelto a la normalidad… eso no quiere decir que esté mintiendo ahora.
- Lo que digas – dijo Ueda con expresión victoriosa.
Después del ensayo Kame se reunió con su manager y le explicó que había estado enfermo, pero que después su problema había desaparecido. Aún así insistió en que se hiciera exámenes esa tarde. Al día siguiente estaba libre, pero Jin tenía grabación de su película.
Kame pensó en lo que había pasado en los últimos días, era desconcertante como su relación había tomado otro rumbo. Unos días atrás se hablaban solo un poco más de lo suficiente y después Jin estaba en su departamento cuidándolo y acostándose con él para quitarle el frío… ¡y siendo besado por él! ¡Había besado a Jin!... Él solo deseaba volver a lo que era antes, esto superaba totalmente sus expectativas.
Al día siguiente tenían el último ensayo antes del concierto, Kame llegó temprano, estaba ansioso, aunque gran parte de su entusiasmo era por ver a Jin, pensó que parecía una colegiala. Llegaron todos, pero Jin no llegaba.
- ¿Le pasó algo a Jin?- preguntó Koki a Kame.
- No lo sé, no lo he visto desde el ensayo anterior.
- ¿Se pelearon? – preguntó Ueda.
- ¿Ehh? ¡No!… A ustedes tampoco los veía desde el ensayo anterior y no nos hemos peleado.
- Son relaciones diferentes – dijo Ueda con expresión pícara.
- No sé a que te refieres…- le respondió Kame.
- Debes estar muy feliz de poder mentir a conveniencia otra vez.
Comenzaron a ensayar los cinco, después de una hora llegó Jin, las grabaciones se habían atrasado y no podía irse porque tenía que grabar muchas de sus partes.
- ¿Va todo bien con la película? – le preguntó Kame.
- Más o menos, hoy grabamos mucho porque después ya no podré, por el concierto. Fue muy agotador…
Kame miró a su alrededor, los demás del grupo se habían alejado…
- Parece que ahora les gusta dejarnos solos – dijo Jin con una sonrisa nerviosa.
- Así parece…. esos tontos…
- ¿Ya no te has sentido enfermo?
- No…
Hubo un silencio. Kame pensó que había estado deseando que Jin llegara, pero no en qué quería de él cuando llegara, aparte de verlo…
- Gracias por cuidarme la otra noche.
- No fue nada… no podía dejarte así.
- Fue egoísta de mi parte, hacer que te quedaras en mi departamento, sin pensar si tenías cosas importantes que hacer.
- No tenía cosas MÁS importantes que hacer… creo que fue bueno que no pudieras mentir en ese momento… nunca me hubieses pedido que me quedara.
- Me sentía mal teniendo que decir siempre lo que pensaba o deseaba, me hacía sentir vulnerable y egoísta.
- No está mal que seas egoísta… tampoco que seas vulnerable.
- No me gusta, me hace sentir inmaduro. Ya soy un adulto.
Jin le revolvió el cabello.
- No te presiones demasiado.
Y se fue a ensayar su solo.
El día siguiente llegó y con eso llegó el momento del concierto, por lo que tuvieron que viajar a la ciudad donde sería el primero. Todos estaban llenos de energía. Como siempre el lugar estaba lleno de fans ansiosas por verlos.
En una de las canciones, en una de las partes que Jin y Kame debían cantar juntos, Kame intentó llamar la atención de Jin para que hicieran algo para el público, cantando y bailando más cerca, pero Jin estaba más concentrado en bailar y cantar por su cuenta y no lo notó. Kame se molestó, pero camufló su molestia y siguió con el espectáculo y haciendo fanservice con los demás integrantes que sí lo tomaban en cuenta.
Sabía que estaba siendo inmaduro, pero no lo podía controlar… ¿no se suponía que su relación había mejorado mucho y ahora eran mas cercanos? Kame lo había besado y Jin no se había quejado al respecto, Jin había dormido con él… ¿eso indicaba que estaban más cercanos? ¿O acaso Jin había sido amable con él sólo porque se encontraba en una situación desafortunada?
En los camarines había buen ambiente, estaban cansados pero felices porque el concierto había sido un éxito.
- ¡¡Estuvimos geniales!! ¿¿Cierto??- dijo Jin a Kame.
- Mmm – se limitó a decir Kame, apartándose de Jin.
- ¿Kame?
- ¿Qué pasa? – le dijo fríamente.
- ¿Estás bien?
- Perfectamente.
- ¿Estas enojado?
- NO.
- Sí lo estás. ¿Qué pasó? ¿Por qué estas así?
- No pasa nada – dijo apretando los dientes.
Se alejó. Jin no lo entendía, no había hecho nada, ¿o si? Estaban muy bien y ahora Kame parecía enojado con él… ¿por qué? ¿Quizás era porque quería que se vieran después del ensayo del día anterior? ¿Porque no le mandó mensajes? ¿Por qué? No eran una pareja en ese momento… pero pareciera que estaban a un paso de ser algo más que amigos. ¿Por qué estaba enojado en ese momento? ¿No quería que su relación avanzara más? Kame era muy complicado, en especial ahora que no entendía como pensaba y aunque le preguntara no sabía si le respondería sinceramente… de hecho no le estaba respondiendo sinceramente.
Kame se acercó a Junno para preguntarle si quería compartir con él la habitación, Jin lo escuchó… ¿no estarían juntos? Era una prueba irrefutable de que Kame estaba molesto con él. Junno aceptó con una sonrisa.
- Entonces me iré a dormir ya, estoy muy cansado- dijo Kame.
Jin lo siguió y lo detuvo antes de que entrara a la habitación.
- No sé qué te pasa – le dijo. – Pero definitivamente eras más agradable cuando no podías mentir.
Kame enfureció, pensó en muchas cosas que decirle, pero no quería hablar con él, esa última frase le había dolido.
- Buenas noches, Akanishi – le dijo cortante antes de cerrar de golpe la puerta de la habitación.
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